miércoles, 28 de noviembre de 2012

La cuenta de la vieja



La cuenta de la vieja.


Escribo esta entrada desde el desprecio que me están produciendo algunas noticias que nos desbordan últimamente a todas horas por todos los medios posibles.

Y es que estando en un país, estado, o como coño quieran llamarlo, empobrecido hasta límites inimaginables, las noticias de corrupción, los fallos del sistema y la impasividad con la que actúan nuestros queridos mandamases, a cualquier persona medianamente decente tendrían que removérsele las tripas.

Empecemos por el sudeste asiático. Hace más o menos un mes, se descubrió en el polígono Covo Calleja de Fuenlabrada (Madrid) una autentica industria del blanqueo de dinero, liderada por el hasta hace no mucho un ejemplo de empresario inmigrante hecho de la nada, Gao Pin, donde el supuesto “prohombre” había montado un entramado de empresas exportadoras de productos de China que se distribuían por toda España. Hasta ahí todo normal, es evidente que el mercado asiático está entrando en todos los sectores del entramado comercial español, eso lo sabemos desde hace tiempo. Pero lo que hizo saltar la alarma es que en las citadas empresas se blanqueaban hasta 300 millones de euros al año. ¡Menudo empresario del año!
Este tipo, que no hace mucho le hicieron un reportaje en Antena 3 como modelo a seguir, y que se codeaba con las altas esferas (El rey, Aznar, Zaplana y demás cómplices en la sombra) tenía un entramado montado donde no sólo blanqueaba dinero, sino que también introducía productos de contrabando en nuestro país y muchas otras actividades delictivas que no me voy a extender en explicar.
Pues bueno, lo detienen junto con otras cien personas y los ponen a disposición judicial.
Pero cuál es mi sorpresa el otro día al escuchar en la radio que por un “erro de procedimiento” esto pollo y todos sus secuaces se libran del maco y quedan puestos en libertad. Bendita justicia. Y mientras el ministro de Justicia, el guay Alberto Ruiz-Gallardón, propone unas medidas de pagos lesivas para la mayoría de la población. Antes se decía que la justicia era para los ricos. Ahora se confirma.

Entre tanto ajetreo de camiones y furgones policiales, aquí, en el País Valenciano, las farmacias están en pie de guerra porque están en una situación límite a causa de los impagos de la Generalitat del bueno de Alberto Fabra.
Nuestros estimados gobernantes autonómicos que han dilapidado dinero a espuertas como quien echa mieses al fuego. Tienen la desfachatez, ahora en época de vacas flacas, de aplicar recortes a todo lo que tenga que ver con los servicios sociales. No sólo no pagan a las farmacias, también se están cargando los centros ocupacionales para discapacitados, las residencias para la tercera edad, las ayudas en los comedores sociales, las subvenciones a Proyecto Hombre o las perreras municipales. Pero eso sí, para el aeropuerto de Castellón ya se está proyectando una remodelación. Una remodelación a unas instalaciones que están sin estrenar. Vergonzoso.

Por otro lado ayer saltó la noticia de que la Generalitat se iba a hacer cargo del crédito que tiene el Valencia CF con Bankia. Solo nos faltaba eso, que encima tengamos que pagar con nuestro dinero los desvaríos de unos cuantos ineptos como Soriano, Soler o Roig. Espero que a quien le toque reflexione hantes de dar un duro al Valencia CF SAD sin arreglar antes todos los problemas de impagos que tenemos en nuestro país.

Pero el colmo del esperpento y la vergüenza ajena, que uno no sabe si reír o llorar es lo que ha pasado con el Banco de Valencia.

El Banco de Valencia, uno de los mas antiguos de España, le fue confiado a ese gran economista que es José Luis Olivas. El hombre de los records.
Este INUTIL, y lo pongo con mayúsculas, porque hay que ser inútil para hundir 3 bancos en un solo año, ha destrozado todo el sistema bancario valenciano si apenas saber lo que es un balance. Señores politicuchos, todos sabemos que hay que enchufar a los amiguetes por ahí una vez dejan la política, pero a personajes como el ceporro este, más vale que le den un folio y una caja de colores y lo pongan a hace dibujos en un despacho, que como dije al principio, mas inútil que el señor este no hay.

Pues bueno, a la dirección del Banco de Valencia, lo único que se les ha ocurrido para enmendar este entuerto es vender el Banco. En principio la idea sería buena si no fuese porque se lo han vendido a la Caixa ¡Por un euro, señoras y señores, por un euro!
Hay que ser inútil pero redomado. Así nos va. Y los pequeños accionistas del Banco de Valencia que se jodan, porque no van a recuperar un céntimo. Eso sí que es velar por los intereses de los clientes. Nos ha jodido mayo.


Dejando un momento de lado Valencia, me voy para Catalunya.
Este fin de semana han sido las elecciones para la Generalitat. Donde el president Artur Mas quería obtener una mayoría del 400 % para llevar a cabo su referéndum soberanista.
Yo no estoy a favor ni en contra de la independencia de los pueblos, pues soy internacionalista, pero sí que apoyo las pretensiones legítimas de los pueblos en convertirse en estados autónomos. Lo que no estoy a favor son de los órdagos para ver quien la tienen más larga como hizo Artur Mas donde sólo se busca rédito electoral y monetario.
Pues bien chato, pues parece que te salió el tiro por la culata. En las elecciones los verdaderamente ganadores fueron los partidos de izquierdas, honestos como Esquerra Republicana, Iniciativa per Catalunya-Els Verds Esquerra Unida y Alternativa y las CUPS. A todos ellos enhorabona. Para Mas, que se mire lo de sus cuentas en Suiza, que al final como todos, su única patria es el morado de los billetes. Espabilao…